"La mejor manera de olvidar a una mujer es convirtiéndola en literatura". (Henry Miller)
Por suerte, en mi vida ya no hay nadie a quien quiera olvidar. Sin embargo, una voz dentro de mí me grita, me zarandea y me impulsa a coger un bolígrafo, un lápiz, o cualquier cosa que encuentre cerca y me pone a escribir cosas absurdas, que ni yo consigo descifrar, que parecen salir de mi propio animal interior.
He ahí la razón de este arranque de egocentrismo (incluso el fondo es una foto mía), haciendo un blog sobre mí y para mí, como si a un jodida persona en este jodido mundo le fuera a importar una jodida palabra de mi jodida boca. Dejando dramatismos a un lado, lo que quiero decir es que necesito esto, necesito escribir como terapia curativa, como purificación; necesito un rescate urgente y nadie de fuera va a venir a salvarme, así que ¡movamos el culo de una vez!
Así, quizá, con un poco de suerte, acabe olvidando a esta mujer apática, torpe, errática, y realmente jodida que vive en mí y me destroza la casa.
[Lunes, 31 de octubre de 2011, 12:30]
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